La convivencia con un enfermo mental
Muchos familiares y amigos de personas con enfermedades mentales y neurológicas deben cambiar mucho su vida cuando se detecta la enfermedad. Debido a eso, muchas personas deben ser tratadas también porque pueden llegar a desarrollar ciertos tipos de trastornos. Para que esto no suceda es muy importante no olvidarse nunca de uno mismo y centrarse unicamente en el enfermo, ya que si no se cuida uno a sí mismo tampoco podrá servir de ayuda a los demás. Es muy importante intentar que la vida se parezca a la vida que se llevaba antes, hay que desconectar, salir, dar un paseo, ir al cine, hacer deporte etc. Es impresdicible tener contacto con otras personas además de con el enfermo y ser capaz de moverse en otros ámbitos. Quiero hacer referencia a un síndrome que puede aparecer cuando el cuidador pasa todas las horas del día con el paciente, olvidándosede todo lo demás, de su vida y de sus obligaciones.
El hecho de convivir con un enfermo crónico, sin importar exactamente cual sea la enfermedad de la que se trate, comporta un cambio brutal para la vida de las personas que lo rodean. Entre este círculo de personas más allegadas casi siempre destaca una que se responsabiliza especialmente del cuidado del enfermo. Este síndrome se denomina el Síndrome del Cuidador.
El síndrome del Cuidador es un trastorno que se presenta en personas que desempeñan el papelde cuidador principal de una persona totalmente dependiente, que se caracteriza por un excesivo cansancio y agotamiento físico y psíquico. Esta persona de repente debe afrontar una situación nueva para la que inicialmente no está preparada, y que, además, consume todo su tiempo y energías.Esta situación provoca un estrés continuado en la convivencia diaria conla enfermedad que llega a agotar todas sus reservas físicas y mentales.
La situación puede llegar a desbordar al cuidador, en numerosas ocasiones su vida queda anulada. Esto puede provocar estados de ansiedad y depresión, de agresividad contra los demás y de aislamiento. Por esto es muy importante informarse bien sobre las necesidades del paciente y su enfermedad, y así planificar con la familia el futuro del enfermo.
Es fundamental también que el cuidador se preocupede si mismo, tiene que salir, ponerse en contacto con otras personas que se encuentren en su misma situación y acudir al médico para tratar su estado físico y psíquico si fuese necesario.
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Estoy totalmente de acuerdo con esta entrada. Algo que muchas veces no se tiene en cuenta es que para poder cuidar a los demás hay que cuidarse primero a uno mismo. Muchas veces las ansias de querer ayudar al enfermo nos hace olvidarnos de nuestra propia salud, lo que nos conduce a hábitos poco saludables y perjudiciales.
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